2012.

Alguien tuvo una idea muy linda subir la mejor foto vista en el 2011.

Lo que sucedió es que las mejores tenían los derechos reservados.

Las mías no, son de ustedes como éstas, sencillas palabras, como los deseos para el 2012

Deseo

Que tu ruta no sea de piedras intrasitables.

Que tengas una escalera con descansos

Que juegues y distrutes como un niño o con un niño.

Que sepas mirar al comenzar el  día, todo lo hermoso que te rodea

Que si tienes madre brinda con ella , y si no la tienes brinda por ella.

Que seas feliz con lo logrado, guarda los candados,  vacía tu mochila, camina liviana, ten la ruta segura,  ama , sonríe…

•Hace diez años que no está a mi lado, pero siempre me cuidó y me cuida la espalda, es mi ángel de la guarda.

Con el ala a sus cristales …

Amigos.

La idea de los cuentos de navidad, éste año fué de Sendero. Me pidió si yo podía convocar a nuestros amigos a que escribieran un cuento sobre ésta época del año que tantas evocaciones trae.

Comenzó Mercedes Molinero. Su cuento se llama Mi abuela Rosario. Los invito a leer ese hermoso cuento, donde el eje central es la abuela, de esta chispeante española.

Después de mi cuento llega Micromios, y serán sus letras y sus fotos los que llegarán hasta ustedes desde Barcelona.

En la medida que nos vayamos organizando, leeremos a Sinfonía de la vida, con Florí desde Venezuela, a Cruz del Sur, viajero infatigable y sus hermosas fotos desde Argentina, a Sendero al que todos estamos esperando desde Méjico.

A todos aquellos que quieran compartir, sus letras, sueños, recuerdos,  sean  bienvenidos.

Ya me despedí  desde Diciembre desde el Sur, pero igual ahí va mi abrazo.

Gracias por llegar.

Hasta pronto. Hasta cuando gustes.

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Efecto creado por Stella

Yo fuí una niña solitaria. Era hija única. De ese tipo longilínea, que come  poco y desperdicia más. De esas que usan camiseta de lana e igual se resfrían.  Pero que se le va a hacer, la suerte estaba echada.   Con un botón así, basta la muestra !

Así que lo que no tenía  lo fantaseaba . Es decir lo único que había  de pesado en mi  cuerpo, si se puede calibrar así, era la loca de la casa. Como una niña común y corriente, imaginé que conversaba con muñecas y que ellas me respondían, las vestía de manera estrambótica, pensando en artistas ,  bailarinas, o hadas .

Bailé destornillando la cabeza del cuello, sintiéndome  Ginger Rogers  y me puse como ella  todos los zapatos con taco que encontré o me permitieron usar.

Hasta que más grande me hice de las Hermanitas Descalzas.

Cocinaba, en una cocina que era una lata de galletitas María, con visor . Todas las meriendas que no comía, las servía junto con el té a visitas inexistentes. Abría y cerraba la puerta a vecinos que nunca nos visitaron:  Pase usted,.. tome asiento,… cómo está señora.? Éste es su niño?

Jugaba sola a las cartas. Fuí campeona del Roba Montón.

Entre lo real y la imaginario , existió un nombre. Me dijeron que significaba estrella en latín, pero no era la que yo conocía… Lo bueno es que no tenía  ni idea del latín.   Fué con una mirilla que me pusieron Stella.

Quisiera que alguien  me dijera si no es difícil para un niño la S con la T ..E y la LL. Saben como aprendí mi nombre cuando me dí cuenta que no importaba como sonaba, sino que ponía la mejor nota STE, y le agregaba la LLA, de llama o llanto, eso fué a gusto del consumidor.

Cuando rondaba  la edad en que uno pone distancia de los demás, me disgustaba  que me dieran un beso, y me los quitaba  con la palma de la mano y  los mandaba al viento. Los mandaba lejos porque me habían enseñado que el viento es el aire en movimiento, y pensaba que iban para el Ángel de la Guarda, dulce compañía, que nos protegía  de noche y de día.

Llegó un momento en que mandé hasta los abrazos. Los abrazos son mucho más pesados.  Pobre Ángel.!  Mandé todo lo ajeno.  Dejé lo más cercano, dejé poco.

Fué un veintitrés de diciembre, en víspera de nochebuena, que una prima de mi madre llegó a mi casa. La ví de refilón, porque lo primero que hice fué irme para mi cuarto. Pero cuando me llamaron no tuve más remedio que presentarme. La señora dijo conocerme , que me había visto de chiquita, y no sé cuantas cosas más. Pero lo que me gustó fué que me dijera que lindos zapatos que tenía puestos. A partir de ahí, entró en la LLA de mi nombre , digamos que fué la llave, para hacerlo.

Le conté que los zapatos me los había comprado mi papá en el London Paris, que eran igual a los de Shirley Temple, que no eran para mi edad porque tenían una tirilla en el tobillo, pero que eso no importaba, porque yo cuando fuera más grande iba a ser artista como ella, o bailarina..Daba igual..

La señora que se llamaba Elvira me dijo, que le parecía estupendo que quisiera ser artista, que ella quiso serlo pero que no pudo, porque no la dejaron

– No la dejaron  ser como Shirley ?

– No. Y me gustaba cantar . Y nunca tuve la suerte de tener zapatos con tirilla.

Me ganó el alma. Pero mucho más cuando dijo.

– Me dijeron que vas a la Escuela de Declamación, y me gustaría sentirte decir un verso. Sabes a mi siempre me gustó la poesía, te gustaría que recitáramos juntas si sabemos las dos la misma poesía.?

Lo que pasó, es que la señora era como de la edad de mi mamá o mayor, y no sabíamos las mismas poesías.

Al final yo sabía un pedacito de Volverán …

Y de pie las dos, yo con mi clarinada y ella con su voz de trombón, empezamos a recitar;

Volverán…las oscuras golondrinas de tu balcón sus nidos a colgar…

Ahí me paré porque no sabía más, y  Elvira siguió

– Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar; tu corazón, de su profundo sueño tal vez despertará.

Cuando terminó la ví, tan emocionada, por unas golondrinas oscuras, que hacían nido,  y que igual volvían , aunque se fueran,  que me desnorteó.  Me acerqué y la abracé.

Ahí fué cuando mi madre se dirigió a la cocina para traerle a Elvira algo fresco, mamá habló de una limonada con hielo  y estoy casi segura que con lo creyente que era, estaría rezando para que Elvira, se fuera, antes de que le diera por cantar un Tango.

Pero no, sacó debajo del sillón un gran paquete, y con su voz ronca dijo

Foto tomada por Stella

– Espero que te guste.

Milagro..!.Milagro..!.Una caja grande de cartón a cuadritos blancos y azules, con mirilla como la de la cocina pero se veía a través de ella, la cara de un bebote, con las mejillas rojas como manzanas deliciosas, la boca abierta y …chupete..!

Magia..!.Magia..!.Al costado tenía una mamadera que se llenaba de agua, se le daba al muñeco y se hacía pis en los pañales.!

– Se llama Simeón.me dijo.  Y riendo agregó por lo de meón.

Elvira fué  una estrella de Belén, igual a la que colgaba arriba del nacimiento.  Una madrina mandada por la gracia divina,  porque me dió el mejor regalo de cumpleaños por muchos años, y ésa fué una de la navidades más felices de mi vida.

Todas las niñas a determinada edad desean ser princesas, hadas, artistas, bailarinas, recitadoras, cantantes , pero siempre…

»  Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, y, otra vez, con el ala a sus cristales jugando llamarán.  »  A  ser mamá en alguna navidad «

Diciembre en el sur.

.

Desde Uruguay.

Diciembre.

Sus luces de navidad , sus papeles y globos de colores, sus cintas, sus cajas,  las ilusiones de los niños, los pedidos increibles, sus bebidas, sus festejos,  sus rezos, sus recuerdos, los regalos, los abrazos y los besos. Mesas vestidas de noche, luciérnagas, enviadas a lo alto ,  y explotan en mil colores, como deseos compartidos.

Foto de Stella.

Amigos del Blog ,  compañeros de rutas imposibles, aventureros de ideas, conocedores de sus paises, amantes de los cuentos ajenos.

Estamos en la línea  recta, la que indica que se va un año, de ilusiones, de alegrías, disgustos, amores y desavenencias, y todo lo imaginable en la vida de cada uno. Porque somos una unidad de Bloggeros,  que se puede tejer de mil maneras, viéndola desde ángulos diferentes . Éso es hermoso, enriqueceder, tanto lo escrito como sus comentarios como dice Rub,

» Que él ve a través de nuestros ojos» ,o nosotros vemos por sus ojos «Caminamos despacio, haciendo una fila; ellos con su vestimenta blanca; yo, con la imagen de ella, de sus largas y oscuras cejas. Los relámpagos se sucedían, y el cedro era un enorme molino que, al moverse, hacía gritar a los pájaros cada vez que sus ramas se atropellaban  «o como

Carme, diciendo «La magia de la palabra, escrita, dicha e incluso imaginada nos permite a los hombres soñar.»  y en su última poesía .

No a robar la verdad y devolver otra distinta.
No a sacar la mano, para pedir lo que es de uno.
No al miedo de ser y no al miedo de no ser.
No, no y no, infantil e inconsciente»

Mercedes » Me alegro mucho de vuestras sonrisas, en realidad es lo que pretendo, entreteneros. agregando en otros comentarios «Deberíamos tratar de que ningún ser humano debería sentirse tan triste, como para tener que acudir a ese destino fatal o

«Y así es como surgió el “síndrome del príncipe azul”. Todas hemos crecido en el convencimiento de que aparecería, en nuestras vidas, un príncipe a rescatarnos de nuestro entorno.»

Florí «Así es Candy, la verdad es la que nos hace libres.» o «Mi sueño…Vive en el horizonte con una estrella hecha de fuego, uno que no se consume, aquel imperecedero…

Ana,»Acordarnos de eso, cuando sentimos que nos hundimos por cualquier motivo. Pararnos y pensar, que el tamaño y la importancia de las cosas es relativa.»

Carlos y sus estupendas fotos de eterno viajero «Todo brilla ,  el universo vibra de otra forma en esta estación, solo el cuestión de detener la vista en lo sencillo.»

Teresa » Stella, como la vida misma, tu lo has dicho, nos reflejamos en tus hermosas palabras.» Anne «La vida es así, hecha de encuentros y desencuentros! Me tomo un tiempo pero te tengo en mi pensamiento. Fiorella «Muy lindo relato :Dsiempre alegra el alma leer tus escritos.»

Inés » Se marcharán juntas en el tren de las doce, llevan consigo a su gata Tecla,  sus violines  y cuatro cosas más. «»Fede » Abuela mostré tus trabajos a mis compañeros de oficina y tus fotos en Flicker «Macoché» Me encantan tus escritos, tus presentaciones en power point »

«Miguel».  Es muy diferente vivirla y disfrutarla íntegramente que pasar por ella a medio gas, sin la necesaria intensidad»

Magdalena » Trepada a mis letras construyo con ellas una soga que me libere de ésta esclavitud mental.«

Foto de Stella.

Hay cuadros pintados, dibujos a lápiz, collages, fotografías, presentaciones estupendas, videos, música, poesía, leyendas, reflexiones, cuentos., Power Point.  Algunos comentario son resúmenes o extracto  de otros escritos, no son dirigidos todos  a mí, pero todos forman ese cuadriculado de emociones y muchos de ello dan un valor agregado a lo ya redactado..

Foto de Stella. Artesano RM.

Diciembre.

Amigos del Blog. A brindar por todos y por cada uno en particular. A dibujar con luz, a captar lo mejor de los otros, en el reflejo de nuestras pupilas, deseando que compartan con sus seres qeridos, éstas fechas tan hermosas.

Foto de Stella. Artesano RM.

Estoy conversando con ustedes, largamente como muchas veces emito mi comentarios, pero lo hago como en una reunión, porque leerlos para mi ha sido un fiesta.

Brindo porque cada deseo  de ustedes se haga realidad y gracias, por estar a mi lado. Un abrazo muy fuerte  donde los incluyo a todos, hasta los que no se animan a comentar.

Hasta pronto.

Mojando telas

Usos y costumbres.

Relato Breve.

Cuando la recuerdo, la veo cruzar la calle y subir los tres pisos por escalera.

Mujer pequeña, delgada, de lentes redondos, y cabeza baja.

Siempre con sombrero, en invierno era de felpa gris, que hacía juego con el saco recto, y guantes de cabretilla oscuros y  en verano uno de paja azul, con trajecitos estampados y guantes calados de hilo. Olía igualito a una crema que se acompañaba con orejones de ciruela, pero me enseñaron cuando lo dije que olía a heliotropo .

Nunca hable con ella, nunca me habló. No me acordaría de ella hoy si no la asociara, con lo que ocurrió cuando diciembre avanzaba

Cosía con una modista que vivía en el tercero. Según tengo entendido, hacía el trabajo de terminación, dobladillos, ojales, ayudaba en las pruebas, y alguna cosa más

En ésa época se mojaban  las telas que se presumía podían encogerse. Así que como era el último piso era más fácil el  acceso a la azotea. Todos tenían ese derecho. Una cuerda o alambre por apartamento y los palillos numerados. No todos subían tantos pisos, y acceder a ella tenía algo de vértigo. Como subirse a la motaña rusa del parque Rodó.  Nunca me llevaron a conocerla.

Un día mirando por la ventana que daba a un pozo de aire, salí corriendo a contarle a mi madre, que arriba había fantasmas. » – Donde..donde…?»  – En la azotea», respondí. Y ahí fué que me explicó, que eran las telas que lavaba la modista y que con el viento se movían y producían esas sombras en las paredes.

Antes de llegar a fin de año, vino junto con la lotería una novedad. Todo en secreto. La ayudanta de la modista que se llamaba Ethel había sacado en la grande  dos participaciones.

Era rica, o casi rica, o medio rica, se podía comprar una casa y le sobraba dinero !!

Lo que se conversó en secreto fué increíble. Un secreto a voces.

» – Qué suerte ahora se podrá casar.»  Era una gran conquista en ésa época. Casarse. !!

«- Bueno, primero conseguir al novio «,  – » Después vemos las intenciones, porque puede tener negras intenciones. »

Qué importante la intenciones.!!   » Pueden ser de colores  !!

Pasó el año, y Ethel seguía en las mismas, subiendo las escaleras, y mojando telas.

Pregunté, cuando se iba a casar, porque yo quería ir a verla a la iglesia. » – Todavía no consiguió novio, más adelante.»  Después quise ir a ver la casa que se había comprado.   «-Todavía no consiguió casa, más adelante.»

Cuando se tiene siete años, conseguir algo más adelante, dejó de interesarme y pasó a ser Ethel, el mismo manequí, visto tantas veces en las vidrieras.

Cuando entró marzo, y fué el comienzo de la escuela, dejé de ver a Ethel, y de mirar para la calle. Tenía una mesa de viena desarmable, que hacía las veces de escritorio para mí.  La apoyaba debajo de la ventana, la vista era la espantosa pared  del ducto, y de refilón un pedazo de una ventana de un vecino, eso sí » si apoyaba la ñata contra el vidrio » veía la azotea, y las telas batiéndose contra el viento. Algunas parecían banderas. Había cambiado los motivos, me había vuelto más patriota con el tiempo.

Un día de niebla cuando había regresado de la escuela, y estaba apoyando la cartera, porque me iba a tomar la merienda fué cuando sentí como una especie de grito o golpe no lo puedo precisar, lo que sé fué que al acercar la cara a la ventana ví cuando caían las telas, unas quedaron flotando, y se fueron lentamente al patio, otras parecían un atado, y hasta las cuerdas , los alambres y los palillos pegaron en la ventana.

» – Mamá se rompieron las cuerdas y las telas de la modista se fueron para cualquier lado, muchas se fueron por el ducto.»

El edificio entero, se estremeció ese día.

Supe porque me dijeron  que no vería más a Ethel . Se perdió del ángel de la guarda.  Una idea aproximada de que se fué al cielo. Y crean ésto no lo dudé, si estaba en la azotea mucho más cerquita, casi entre las nubes.

La modista se mudó.

Y yo saqué mis siete años de conclusiones. Que me daba pena no ver más  a Ethel, aunque nunca me dijera ni buenos días, por educación.  Que no sirve para nada los papelitos de la lotería, porque no te consigue novio, y entonces como no tenés quien te quiera,  no te casas  de blanco por la iglesia. Que toma mucho tiempo comprarse una casa aunque seas medio rica .Que no laves las telas , igual están limpias,  que se encojan  cuanto quieran . Las cuerdas de cáñamo te hacen enredar, y aunque el angel de la guarda esté contigo,   te podés ir al cielo en un alambre,  aunque no quieras., porque todo tiene que ver con las intenciones.

Que hay intenciones de color negro.

Foto de Stella.

Tango.
La ñata contra el vidrio,
en un azul de frío,
que sólo fue después viviendo
igual al mío…»

Letra de Santos Discépolo.

La red del extraño

Foto de Stella.

El silencio era total.

Cuando la gota llegó al cuello, despertó. La oscuridad la envolvía, y lentamente su  forma fué  fetal. Como si fuera posible, su respiración se acortó, casi quedó dentro de sí, pero el palpitar del pecho, esa ave que no duerme le marcaba, un ritmo.

Se sentía una burbuja  detenida en un espacio donde no se puede  calcular distancia alguna. Ni el aire tenía espesor. No tenía volúmen. Sólo vacío.

Sintió el aliento.

Las gotas, una a una rodaban por la piel,  y  las manos quietas en plegaria, pedían, rogaban.

La almohada aprisionaba su cara marmoleada, y la burbuja estalló en mil colores, y sintió la distancia, calculó sin ver, y se vió  reflejada, en unos ojos, cien ojos, mil ojos que miraban.

El beso llegó.

En la curva del cuello, ahí donde la nuca se hace esencia  en primavera, dejó ese calor quemante de deseo.

Las pestañas se hicieron espesura, la quietud de muerte, el frío del espanto, la agonía.

Ladrón de noche ajena, dejó el residuo de braza, en ese roce fugaz.

La red del extraño, se transformó, en hilos pegajozos , secos, y quebradizos  en el mutismo .

Nada fué igual desde ese momento.

La mujer siente el calor del beso dado, y el hurtador el fresco húmedo de la piel entre los labios.

Déjame sólo un poco de mí mismo para que pueda llamarte mi todo.

Rabindranath Tagore