Él pide contención, no hablar fuerte, sin reclamos. La sumisión sin lágrimas.
Atanacea. Aunque sus ojos digan basta, y el cuerpo rechace el movimiento de las manos, y la mente a la loca de la casa.
Callar ante el olvido, estarse ligada a las horas quedas del otoño.
Transitó el nutientre de la tierra, fué semilla de siembra, cielo de cosecha, agua en los surcos de piedra, resguardo perfumado en las tormentas.
Ahora llega el ocaso con alas, siendo ella apoyo del cayado en el yermo poblado..
Se sintió nube, trasparente blanco, se vistió de niebla, se guardó su llanto.
Al tiempo le pregunta …
Donde deja la cosecha, el cobijo, donde el amor y la mirada…Donde los deja?
A la sombra de qué casa morará su alma.?
Sombra azul de los jacarandaes.
Foto de Stella.
*140 palabras , con título dado.