108° Exposición Internacional de Ganadería.
Desde un camino, un jóven, casi un niño saluda con la mano a la distancia y dice fuerte más a su conciencia que a quien dirige sus palabras.
– Volveré mama.
La ciudad lo trampeó de mil maneras, y al poco tiempo en un ahogo de añoranza quiso retornar, le fué imposible carecía de todo, no tenía nada.
Pasó la agonía de la calle sin logros, sólo con palabras.
Abrazó la distancia. Lo pensó mil veces lo descartó otras tantas.
Cuando al fin lo logró, ya no estaba la promesa dada. Los otros no interesan, las explicaciones duelen más que las palabras.
Sin apero alguno el día cálido lo recibe, y sin propónerselo se detiene sobre sus gastadas articulaciones.
Aislado escucha el canto de los pájaros, los mugidos, los balidos, los relinchos, las voces de los otros ,y todo el sitio huele a fiesta, a pasto, a ración, a agua, y en el polvo que levantan patas y pezuñas, como un hornero se siente en casa..
• Hornero. Se los encuentra en Brasil, Paraguay, Bolivia, Argentina y Uruguay, donde es el ave nacional.
Las historias se repiten. De estas tierras emigran a los estados unidos, prometiendo volver con harta lana, y la familia se cansa de esperar, unos murieron en el intento, otros lo lograron, pero formaron otra familia y sí, algunos volvieron, pero sin lana, porque fueron deportados, y quedan los que si pudieron y regresaron.. bello y triste la historia… un beso
Suponiendo que sueñen con una vida mejor que la que da el campo, creo que es lógico.
Ahora que la ciudad atrapa hasta en los umbrales y forma el cordón de miseria y de asentamientos que tenemos, es una realidad.
Para viajar desde Uruguay a Estados Unidos, es necesario un dinero que la mayoría que busca en el campo otra vida no lo tiene.
Nosotros estamos perdiendo los cerebros que se van al norte. Otra realidad.
Un abrazo.
Hasta pronto.
Que lástima verdad?? lastima de muchas ilusiones que nunca tuvieron un final feliz…
Besos con alas
Yo entré a tu Blog, porque me alegraban tus comentarios a Emy, y me encontré con la magnífica sorpresa de tu poesía.
Felicitaciones.
Un abrazo y un besos con alas para tí.
Hasta pronto.
Se intenta encontrar una vida mejor, para volver rico y con buena posición, pero la realidad para la mayoría es muy diferente.
Un Abrazo Stella 😦 .
Las palabras » Volveré mama «, las saqué de lo que dijo mi abuelo cuando se vino de Burgos para Montevideo con sólo 14 años. Nunca volvió, aunque pudo hacerlo, porque había fallecido su madre, y no quiso ver a ningún familiar más. Hasta dejó la propiedad para los que quedaron.
Siempre hubo desprendimientos, las partidas son tristes…
Un abrazo.
Hasta pronto.
Algo parecido hicieron mis padres, se fueron de Uruguay para encontrar algo mejor y aunque no prometieron volver, sé que parte de la familia les esperaba de vuelta, con lana o sin.
Qué historia tan triste.
Un fuerte abrazo!
No sé si tan triste. Mi abuelo tuvo una hermosa familia en Uruguay.
Voy a escribir algo en tu Blog, que me encanta la fotografía. Ya ví las tuyas, hermosas.!
Un fuerte abrazo.
Me pongo en el lugar de esa madre que ve partir su hijo… y se me parte el corazón. ¡Qué tiempos más duros, querida Stella!, los de antaño y también los de hoy.
Has plasmado una realidad por desgracia demasiado frecuente, que trae a mi memoria ásperos recuerdos. Decir adiós a quienes más quieres siempre es desconsolador…
Si por lo menos la separación desemboca en una vida mejor, es entonces un consuelo.
Pero el anciano de tu relato no ha tenido esa suerte, como tantos otros diría yo.
Te deseo que tengas una semana muy feliz 🙂
Muchísimos besitos, bien repletitos de cariño para ti!!! 🙂
¡cuantas sonrisas te he puesto!, jejejej, me he dado cuenta después de publicar el comentario… ¿pues sabes qué?, ¡que te dejo otra más! 😉
Estoy encantada porque me agradan los Gif y los emoticones. Son graciosos y movibles, como los niños.
Con respecto a las palabras muy simples dichas por mi abuelo, y cuantos más que nunca se sabrá.» Volveré mama «, quedó grabada en mi mente, porque me la repitió mi padre. Era la menor de las nietas y muy chica cuando falleció, después vinieron otros nietos que él no conoció. Ahora se puede decir que soy una de las mayores pasé a la » A «, y soy la única que se ha preocupado por saber algo de ese gentil y cariñoso abuelo que tuvimos.
Escribí un cuento breve para ser leído en la radio y te pongo el nombre por si algún día te interesa saber de los españoles que llegaron a Uruguay –
Se llama » El abuelo Eusebio » Tiene una foto de él, que agregué al subirlo al Blog.
Trajo el apellido a Montevideo.Todos los Mantrana que hay en Uruguay, salen de los dos hermanos que llegaron a éstas tierras uno a Montevideo y otro a Mercedes.
Un abrazo apretadito. Me haces sentirme acompañada, cuando llegas hasta mi post…
Hasta pronto, hasta cuando gustes..Emy…
Gracias querida Stella 🙂 ¡es bien cierto el dicho de que cada día aprendemos algo nuevo!, esta es precisamente una de las cosas que me atraen de la blogosfera, a pesar de la distancia física que nos separa, poder conocer personas como tú que comparten sus conocimientos.
Un abrazo muy fuerte y un montón de besitos!!
Sabes Emy dejé de lado tantas cosas, por el apuro, por el trabajo, por la vida agitada que llevé, que ahora que tengo mi tiempo, porque es mío el resto que me queda, me doy cuenta de cuantas cosas me perdí. Porqué no pregunté más, y no me interesé por mis ancestros.
El conocimiento se pierde y ahora no tengo a quien preguntar.
Gracias por entrar.
Hasta pronto.
Sin quitarte la razón, creo que todos (o por lo menos muchos), echando la vista atrás pensamos lo mismo… «¿y si hubiese aprovechado más aquella etapa de mi vida?, ¿por qué no hice «aquello» cuando estaba a tiempo?».
Sin embargo nos dejamos llevar por el transcurso de los acontecimientos y como bien explicas, en aquel momento estuvimos ocupados en muchas otras cosas que nos parecieron prioritarias.
Goza lo mejor que puedas del presente que es ahora plenamente tuyo y no te arrepientas de nada que ya no se pueda cambiar 🙂
Te cuento una cosa? cuando yo salí de mi país hace once años lo hice porque quería conocer mundo, siempre fui una niña y adolescente fantasiosa, y por eso cuando pude me fui. Nunca me planteé cuánto tiempo, ni si volvería o no, aunque tampoco esperaba quedarme en España tanto tiempo, esperaba recorrer más países (viviendo en ellos digo). Mi hermanito en cambio emigró porque estaba harto de la situación de Venezuela, de su inseguridad, de los sueldos que no alcanzan para nada y de la poca calidad de vida en general… siempre he pensado que ese detalle es una gran diferencia a nivel psicologico, no es lo mismo irse porque quieres que irse porque no queda otra. Se me vino a la cabeza esto leyendo tu relato. Precioso
PD: te quedó muy bonito el fondo del blog, sabes que voy leyendo con retraso y no lo había visto
Espléndido relato tu comentario. Una base para un relato actual de las vicisitudes que se vivieron y se viven actualmente en América del Sur. Hazlo, porque muchos creen en la homogeneidad, de nuestros pueblos. Somos tan diferentes y casi todos o mejor dichos todos, nos hemos zambullido en las crisis, políticas, económicas, sociales, limítrofes,etc.
Un abrazo fuerto y espero tu escrito.
Hasta pronto.