Vichar.

Decían que era un lugar mágico, donde se fabricaban ilusiones de colores, con asientos de cuero, donde sentados se veía pasar el mundo a gran velocidad, se miraba al costado por un espejo retrovisor,  el viento se cruzaba en diagonal, el arrancar era casi silencioso, y el pisar aceleraba.

Se agachó para mirar sobre el gran agujero del portón, para ver la dicha del lugar,  y un pinchazo doloroso, la hizo erguirse y llevar su mano hacia el párpado.

El instante fué urticante.

La peluda de cintura estrecha y abdomen abultado, salió airosa limpiándose sus uñas, haciendo su toilette de dama indigna. No se usurpa el lugar de los ensueños. Nadie escudriña, su nido, ni «vicha» la bolsa con su cría.

La habían sacado de quicio, y después de la lección dada, se puso a tomar el sol, en el umbral.

Foto de Stella.

Foto de Stella. Serie puertas y portones.

•Vichar o bichar. Modismos rioplatenses. Lunfardo.- Espiar a una persona. – Desorganizar una cosa.