La casa guarda la tarde en el invierno.
Juan lee el diario del domingo; Marta teje un saco rosado, pequeño.
La mesa tendida, dulce, pulcra, aguarda.
Anochece, los dos cabecean en silencio.
Bajo el resguardo familiar, nacen niños los recuerdos, hacen ronda los colores, y cantan los ensueños ambarinos.
Foto de Stella
Relato breve 50 palabras