Decían que era un lugar mágico, donde se fabricaban ilusiones de colores, con asientos de cuero, donde sentados se veía pasar el mundo a gran velocidad, se miraba al costado por un espejo retrovisor, el viento se cruzaba en diagonal, el arrancar era casi silencioso, y el pisar aceleraba.
Se agachó para mirar sobre el gran agujero del portón, para ver la dicha del lugar, y un pinchazo doloroso, la hizo erguirse y llevar su mano hacia el párpado.
El instante fué urticante.
La peluda de cintura estrecha y abdomen abultado, salió airosa limpiándose sus uñas, haciendo su toilette de dama indigna. No se usurpa el lugar de los ensueños. Nadie escudriña, su nido, ni «vicha» la bolsa con su cría.
La habían sacado de quicio, y después de la lección dada, se puso a tomar el sol, en el umbral.
•Vichar o bichar. Modismos rioplatenses. Lunfardo.- Espiar a una persona. – Desorganizar una cosa.
¡¡Vamos deja a los demás tranquilos, acaso piensas que no encontrarás castigo a tus curiosidades peligrosas!!.
Un Abrazo Stella 🙂 .
La foto pertenece a un portón de una fábrica de automóviles, hoy desaparecida.
La curiosidad no tiene edad.
Un abrazo Joaquín.
Hasta pronto.
La curiosidad mata al gato… Bien querida amiga, gracias por colgarlo , abrazos hasta tu terruño…
Al gato y a mí.
Un abrazo .
Hasta pronto.
jajajajaj me encanta tu humor, nunca hay que perderlo… besos rub
jejejeje, deduzco que tú también hubieses mirado!!!
MUAKS!!
Ay querida Stella, ¡a mí también me hubiese picado!!, jejej, síiiiiiiiii, lo reconozco: ¡soy curiosa! 😛
Si me cuentan de un lugar tan maravilloso, también querré por lo menos verlo 🙂
Preciosa foto, cariño ¡antes de leer el post, también estuve admirando la de las ramas en el cielo!
Muchos besitos y un fuerte abrazo!!
Gracias por mirar mis fotos, no soy fotógrafa pero hay fotos que son historias por sí solas.
La curiosidad…no hay que perderla nunca porque entonces se va lo que te queda en el recuerdo de la niñez.
Un sitio con carnaval y lluvia, y un abrazo apretadito.
Hasta pronto.